Decoración Toile de Jouy para tu hogar

Toile de Jouy, literalmente traducido como Pinturas de Jouy, son las finísimas telas de algodón que estuvieron muy de moda durante el siglo XVIII y principios del XIX, y que establecieron un concepto de estilo textil para la posteridad.

Un breve recorrido a través de su historia, invita a una fabulosa aventura desde su origen e inspiración en los famosos algodones Chintzes de la India, pasando por su desarrollo en Francia
en donde crearon su propio estilo, hasta llegar a la fascinación que hoy en día sigue cautivando al mundo de la decoración y la moda.

Tanto en telas y como en papel pintado

¿Qué son los Toiles de Jouy?

El término Toiles de Jouy, refiere específicamente a las telas (usualmente de algodón), producidas en la fábrica de Christophe-Philippe Oberkampf, en el pueblo francés de Jouy-de-Josas entre 1760 al 1843. Pero la fábrica Oberkampf, fue sólo una de las centenares de empresas que produjeron este tipo de telas en Francia para la fecha. Los textiles de las otras regiones tienen nombres diferentes: las Toiles de Nantes,
Toiles d'Orange o Toiles Normandes, por ejemplo.

Aunque hoy el nombre Toile de Jouy se aplica a cualquier tipo de algodón impreso con temas bucólicos, los especialistas del tema e historiadores, refieren el nombre específicamente a las telas fabricadas por la famosa Manufactura Oberkampf.

Los diseños florales y el disfrute del campo.

Los tejidos de la famosa Jouy-en-Josas, Toiles de Jouy' fueron los preferidos por la élite aristocrática de los siglos XVIII y siglo XIX, popularizada por los palacios de María Antonieta y la Emperatriz Josefina.

"Un diseño de Toiles de Jouy, sustituye al rico pero aburrido damasco. El placer se instaló en la alcoba, en el lugar del lujo que lo había ocupado con anterioridad". Jean-Claude Gorgy 1789.

Las fiestas rurales eran típicas en muchas escenas impresas en las telas. La aristocracia y la burguesía parecen haber tenido para aquel momento, una visión nostálgica del campo como un lugar de ocio en vez de trabajo. Como era de esperar, las figuras plasmadas más de moda para la década de 1780, reflejan a esta aristocracia disfrutando de actividades tan variadas como los paseos a caballo, las carreras, la pesca o un picnic.

Sin embargo, la mayoría de los algodones producidos por los fabricantes franceses entre 1760 y 1830, se hicieron como los de la India, con patrones florales impresos con moldes o sellos de madera en vez de las escenas bucólicas con las cuales se hicieron famosos.

Motivos neoclásicos, exóticos y conmemorativos.

Las telas funcionaban como periódicos. Sus patrones eran casi crónicas que reflejaban la estética de cambio en las artes en Francia, como respuesta de la agitación revolucionaria, los nuevos ideales y al reemplazo del romanticismo rococó con el clásico estoicismo..

Los diseños en el estilo neoclásico, fueron tomados de las esculturas, bajorrelieves, jarrones y motivos antiguos provenientes de las excavaciones arqueológicas en Herculano y Pompeya a mediados del siglo XVIII.

Lo exótico por su parte, fue la expresión del espíritu de curiosidad que inundó los ideales de las personas y el deseo de descubrir nuevas tierras y culturas. Las artes decorativas abrazaron así este entusiasmo buscando la inspiración en el exterior, dando particular atención a las culturas del lejano y medio oriente, el sureste de Asia y Europa del este.

También se usaron diseños conmemorativos exaltando los sentimientos nacionalistas. Las telas podían recoger importantes asuntos de Estado, como una visita real o una victoria del ejército francés, o eventos de interés cultural como uno de los primeros ascensos de los hermanos Montgolfier, en su globo de aire caliente .

El role de los toiles en la moda y la decoración de interiores.

Antes del siglo XVIII, el algodón era usado muy poco en Francia. Inventarios que datan desde 1700 muestran que fueron las telas de seda con las que se hacían casi la mitad de los guardarropas de la nobleza, la burguesía y las clases trabajadoras. También se utilizaron la lana y la gamuza, pero no eran tan versátiles y no se podían lavar (sino limpiar) como el algodón.

Desde el principio, se hizo una distinción entre las telas usadas para decoración y la destinada a los vestidos. Las telas de placa impresa con una larga repetición de temas narrativos fueron usadas para la decoración, mientras que los algodones con motivos de flores y geométricos se usaron para ambos moda y decoración.

En la actualidad, el término Toiles de Jouy se ha convertido en sinónimo de monocromáticos textiles impresos con escenas bucólicas. Muy deseados en la Francia del rey Luis XIV, hoy como entonces continúan cautivando a diseñadores como Vivianne Westwood y JC de Castelbajac, en la moda y en la decoración.

Actualmente lo podemos encontrar en telas, papel pintado, cuadros, mantelerías, vajillas, decorado pasteles, vestidos, muebles...