HOLA amig@s, la limpieza, el órden y el buen gusto, imprescindibles para mantener la buena energía en nuestro hogar o lugar de trabajo.
Si bien muchos de nosotros tenemos un criterio adecuado para poder ubicar e instalar los objetos dentro de las habitaciones de la casa para que la decoración se luzca como nunca, lo cierto es que no todos tenemos la habilidad para conocer los efectos que pueden causar la forma cómo acumulemos los objetos en ella.
Y es que podemos escoger los más hermosos colores que armonicen con el resto del mobiliario o conseguir los mejores elementos decorativos para las estancias del hogar, pero lo cierto es que si nos los ubicamos correctamente y no creamos los espacios necesarios para que nuestra casa ‘respire’, lo más probable es que estemos atrayendo una mala energía a nuestro hogar.Es bien sabido que cada objeto posee energía, pero estos también absorben la energía de otros objetos en una misma estancia, razón por la que debemos darle a cada uno su espacio para que las energías no interfieran unas con otras negativamente.
Cuando se acumulan objetos en los recintos, lo único que vamos a conseguir es que se rompa la armonía de los espacios físicos y que la energía de las personas varíe de tal manera que llegue a debilitarse con nefastas consecuencias para ellas.
Reunir una serie de objetos innecesarios en la habitación va a llevar a que estos consuman el buen ambiente y destruyan la armonía que debe existir en su hogar, la cual muchas veces es difícil de revertir.
Para que ello no nos ocurra, mantengamos el ‘chi’ lo más puro y cargado posible tanto en los ambientes de la casa como en el cuerpo y la mente, y para ello es necesario ordenar los elementos que conforman nuestro hogar, así como realizar continuas limpiezas y un aseo exhaustivo para eliminar todo lo malo de casa.
Así que parémonos frente a las habitaciones en casa y analicemos todo aquello que está demás para eliminarlo y separar los elementos para que cada uno mantenga su propia y natural energía sin perturbar la de los otros, y menos la suya misma.
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